1.
Disfruta de la comida
Intenta
comer alimentos diferentes cada día para gozar de una alimentación variada y
disfrutar de ella. Come con tus familiares y amigos.
2. El
desayuno es una comida muy importante
Tu cuerpo
necesita energía después de dormir, por lo que el desayuno es esencial. Elige
para el desayuno alimentos ricos en carbohidratos, como pan, cereales y fruta.
Saltarse comidas, y en especial el desayuno, puede provocar un hambre
descontrolada, que muchas veces lleva a comer en exceso. Si no comes nada para
desayunar, estarás menos concentrado en el colegio.
3. Come
muchos alimentos variados
Consumir
alimentos variados todos los días es la mejor receta para gozar de buena salud.
Necesitas 40 vitaminas y minerales diferentes para mantenerte sano, y no hay
ningún alimento que por sí sólo pueda aportártelos todos. No hay alimentos
"buenos" o "malos", así que no tienes porqué dejar de comer
las cosas que te gustan. Simplemente asegúrate de que consigues un equilibrio
adecuado y come una gran variedad de alimentos. ¡Toma decisiones equilibradas
en cada momento!
4. Basa tu
alimentación en los carbohidratos
Estos
alimentos aportan la energía, las vitaminas y los minerales que necesitas.
Algunos alimentos ricos en carbohidratos son la pasta, el pan, los cereales,
las frutas y las verduras. Intenta incluir alguno de estos alimentos en cada
comida ya que más de la mitad de las calorías de tu dieta deberían provenir de ellos.
5. Come
frutas y verduras en cada comida
Puedes
disfrutar de las frutas y las verduras en las comidas, o consumirlas como
sabrosos tentempiés entre comidas. Estos alimentos aportan vitaminas, minerales
y fibra. Deberías intentar consumir 5 raciones de frutas y verduras al día.
6. La
grasa
Todos
necesitamos incluir algo de grasa en nuestra dieta para conservar una buena
salud, pero consumir demasiadas grasas, y en particular grasas saturadas, puede
ser malo para nuestra salud. Las grasas saturadas se encuentran en los
productos lácteos enteros, los pasteles, bollos, carnes grasas y salchichas.
Come de forma equilibrada - si a la hora de la comida consumes alimentos ricos
en grasas, intenta tomar alimentos con menos grasas en la cena.
7. Los
tentempiés
Picar
entre comidas aporta energía y nutrientes. Escoge tentempiés variados, como
frutas, sandwiches, galletas, tartas, patatas fritas, frutos secos y chocolate.
Asegúrate de que tus elecciones son variadas para mantener el equilibrio en tu
dieta, y no comas demasiado, sino no tendrás hambre a la hora de la comida
8. Saciar
la sed
Tienes que
beber muchos líquidos porque un 50% de tu cuerpo está formado por agua. Se
necesitan por lo menos 6 vasos de líquidos al día, e incluso más si hace mucho
calor o haces ejercicio. El agua y la leche son excelentes, pero también es
divertido variar.
9. Cuídate
los dientes
Cuídate
los dientes y lávatelos dos veces al día. Los alimentos ricos en almidón o
azúcares pueden influir en la aparición de caries si se comen con demasiada
frecuencia, así que no picotees o bebas refrescos a todas horas.
10. Ponte
en movimiento
Estar en
forma es importante para tener un corazón sano y unos huesos fuertes, así que
haz ejercicio. Intenta hacer algo de deporte cada día y asegúrate de que te
gusta para que seas constante y no dejes de hacerlo. Si tomas demasiadas
calorías y no haces suficiente ejercicio puedes engordar. El ejercicio físico
moderado te ayudará a quemar las calorías que te sobran. ¡No tienes que ser un
atleta para ponerte en marcha!
Fuente:
http://www.eufic.org/article/es/page/barchive/expid/basics-nutricion-ninos-adolescentes/